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¿Cómo aplicamos Bioimpresión 3D a la medicina regenerativa?

| Medicina regenerativa

El término “medicina regenerativa”, se utiliza por primera vez en 1992 por Leland Kaiser, quien lo define como:

Una nueva rama de medicina se desarrollará para cambiar el transcurso de las enfermedades crónicas y en muchos ejemplos regenerar sistemas de órganos cansados y estropeados”

Vivimos el doble que hace dos siglos, pero, el paso de los años, un proceso natural al que llamamos envejecer, se hace visible con muestras como la pérdida de audición, de visión ola degeneración ósea debido a la pérdida de minerales. La industria farmacéutica y el sector de la cosmética intentan incansablemente obtener la fórmula de la juventud eterna. Sin embargo, probablemente la solución esté más cerca de lo que creemos.  

La naturaleza es sabia, y en esta ocasión ¿por qué no observar con más detalle que ocurre a nuestro alrededor? 

En los mares y océanos aparecen distintas criaturas que son capaces de regenerar tejidos y órganos. Sin ir más lejos, los tiburones pueden remplazar hasta 20.000 dientes. Un anfibio con origen mexicano llamado Axolotl, nos demuestra cómo es capaz de regenerar órganos amputados y otros tejidos de su organismo. E incluso los gusanos planos y las estrellas de mar pueden llegar a regenerar el cuerpo entero.  

Pero ¿Cómo lo hacen? Y, ¿Cómo podemos aplicarlo al ser humano?

Avances tecnológicos como la bioimpresión 3D aplicada a la medicina regenerativa podría ser la respuesta. 

La bioimpresión 3D se basa en la impresión capa a capa a partir de su previo diseño en un software específico. Una vez que se obtiene este diseño, se manda la orden al hardware para que imprima la forma deseada, incluyendo diferentes tipos de biomateriales y células vivas.

Lo que obtenemos como producto final, es una matriz funcional tridimensional que imita el tejido vivo humano, y en esta técnica, Regemat 3D tiene una larga experiencia. 

El siguiente paso, una vez que se obtiene el tejido, es funcionalizar la matriz de forma que se hace necesario la maduración del mismo. Para ello, utilizamos un biorreactor; se trata de un dispositivo donde aplicar condiciones in vivo con el fin acelerar el proceso de maduración del tejido. 

¿Cuáles son los beneficios de esta tecnología? 

Una de las dificultades más grandes que encontramos en el sistema sanitario es el transplante de órganos. Sólo en Estados Unidos hay una cola de 113.000 personas esperando un órgano que pueda salvarles la vida y, un promedio de 20 personas muere cada día en la lista de espera. 

Uno de los objetivos de la bioimpresión será la medicina de reemplazo y la regeneración de tejidos/órganos.

Sin duda, esto puede ser una gran oportunidad y beneficio para la población general gracias a los esfuerzos en los avances de la medicina regenerativa. 

Uno de los objetivos de la bioimpresión será la medicina de reemplazo y la regeneración de tejidos/órganos, donde Regemat lleva trabajando con su equipo de ingenieros para la mejora del sector de la bioimpresión durante la última década, siendo uno de los pioneros y líderes a nivel mundial en el día de hoy.

Así mismo, en REGEMAT 3D comenzamos a trabajar en este campo en 2014 con el inicio de la actividad de la empresa. Actualmente colaboramos con grupos de investigación situados en más de 28 países. Uno de ellos, es la Universidad de Sídney, donde hemos logrados regenerar tejido cardíaco necrótico, o en el Hospital Virgen del Rocío, donde trabajamos directamente en quirófano, la reconstrucción de mallas abdominales.

La colaboración con los grupos de investigación de más de 28 países, hace de Regemat una potencia dentro de la bioimpresión por la velocidad a la que se adapta a los nuevos avances de la tecnología.

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